En política, y más bajo la abrasadora #marcaEspaña, el campo de la batalla mediática está sembrado bajo la sombra de la meridiana claridad, a merced de una única verdad absoluta : el panorama político es un camaleónico sector en rápido movimiento en el que España aún se mueve a cámara lenta. Aunque a haters, trolls y creativos no nos gana nadie, nuestras maravillosas aportaciones a la red de zascas tuiteros y memes, siguen arrastrando la pesada losa del diferido. Sí. Seguimos pendientes de lo emitido en TV para poder proclamarnos como opinadores estrella de las redes. Como diría Julio Iglesias: ‘La vida sigue igual’.
Infografía //Fuente: Expansión.com
Teniendo en cuenta que la carrera hacia la presidencia se ha convertido en el nuevo Camino de Santiago (por lo de la eternidad, claro), los responsables de comunicación y marketing político de los partidos van a tener que exprimir todos los recursos y herramientas 2.0 a su alcance. Aunque algunos nos arrojan migajas a través de Meerkat y Periscope e incluso emisión íntegra en streaming de sus acciones políticas, en pleno debate sobre el coste del Día de la Marmota de una nueva campaña electoral, cobra más importancia la pugna entre cadenas de tv para llevarse el ‘gato al agua’ que la posibilidad de abrirle una ventana a la red que no dependa de una cadena privada.
¿Acaso existe un ágora más democrática que internet? ¿No estamos un poco cansados de que los políticos se hayan convertido en los nuevos tronistas tertulianos de la caja tonta?. Como reflexión general: de todos los humanos españoles 3.0 que van a votar por primera vez , ¿cuántos consumen televisión?. No hay más preguntas su señoría.
Obama, Iglesias y ¿pactos?
¿Qué tienen en común Barack Obama y Pablo Iglesias? La apuesta por nuevas herramientas en sus estrategias de comunicación (con un desfase temporal importante, recordemos que Spain is not USA). Mientras el presidente saliente de EE.UU fue pionero consiguiendo que su ‘YES WE CAN‘ arrastrase una fuerte suma de votos a través de la emisión vía streaming de ruedas de prensa, debates y mítines; en enero de 2015, la emisión vía streaming de ‘La marcha por el cambio‘ convocada por Podemos obtuvo más de 15.00 conexiones a través de sus links e interactividad en RRSS. El partido de Albert Rivera, Ciudadanos, también se ha dejado querer por el streaming a la hora de interactuar con sus militantes en charlas coloquio en directo.
Si resulta que el streaming ha dejado de ser ese gran desconocido para convertirse en el aliado de la ‘nueva-vieja’ política ¿por qué no trasladar esa evolución al gran debate electoral?
Y se casaron bajo la atenta mirada de Periscope
El bautismo político en Periscope como canal de comunicación con sus seguidores vino de la mano de la actual presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes. Antes de hacerse con la Comunidad de Madrid, la popular se sometió a las preguntas de los usuarios para dar cuenta de su programa electoral.
Después del torbellino electoral a escala municipal, otros rockstars políticos comenzaron a coquetear con la app de emisión en streaming. Alberto Garzón (IU), Lo utilizó en el transcurso de ‘Te imaginas todos juntos’ sobre la confluencia de los partidos políticos de izquierdas y movimientos sociales (no… no es un Dejavú).
Aunque el ‘ minuto de oro’ en Periscope ha sido protagonizado por un enlace político (qué nos gusta una boda). Hace escasas horas, la red pudo asistir en directo al abrazo que ratificaba el acuerdo entre Pablo Iglesias (Podemos) y Alberto Garzón (Izquierda Unida), quienes a través de #Periscope explicaban desde la Puerta del Sol a sus bases y seguidores su ‘matrimonio’ de cara al #26J. Exactamente 6.567 viewers fueron testigos en directo del sí quiero desde la cuenta de @ahorapodemos.
¿Lidiará Campo Vidal con la terminología millennial y los candidatos a la Moncloa en un debate emitido íntegramente en streaming sin rastro del branding de ninguna TV? Próximamente … en sus pantallas.